De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
«Si quieren esta poronga bigote tienen que curtirse! Que llenen la pelopincho de barro y a pelear!»
~ Mauricio Macri hablando al Brillante Rodríguez Larreta y a la Carismática Gabriela Michetti
«Maldito desagradecido! Bah! Ya me va a necesitar en la noche de bodas!»
~ Bigote-Poronga hablando solo
El bigote poronga es un desprendimiento anal facial del actual Gobernante de la Ciudad de Fachosaires, Mauricio Nepumoceno Aristóbulo Abelardo Garco Macri.
El bigote poronga nació como nacen tantos próceres, por las ideas revolucionarias de un grande: el General Jorge Rafael Videla, quien fue el primero en ostentar uno en la Gloriosa Gesta contra la Subversión. a su vez, este proto bigote-poronga descendía del Bigote de Hitler, un héroe por la causa blanca, y es padre de muchos de los bigotes morsa de la policía.
Cuando nació Mauricio, las Doce Estrellas Bosteras se alinearon junto con Marte y la Luna, haciendo brillar bajo su nariz una pequeña imagen que su madre dibujó con tinta indeleble: un pene erecto.
El bigote poronga nació una tarde de frío en la cual Mauricio se encontraba a bordo de su Mercedez Benz, recibiendo un poco de calor anal por parte de José Ahmed, bajo la excusa de encontrarse secuestrado. En ese período, su lampiña y blanca tez, por pasar varios días sin poder afeitarse, se manchó de una sucia barba comunista, cosa que causó horror y pánico en su honestamente acaudalada familia, quien dependía de la plusvalía y las políticas de explotación del menemismo para su supervivencia.
Tras esto, el futuro porteño fue hacia el baño. Luego de pasarse crema de afeitar por el culo, se extrajo, comenzó a afeitarse la cara. Sin embargo, nuevamente la Luz Militar lo llamó. Miró la estampita de San Videla del Neoliberalismo, y comprendió su destino: él también debía llevar una poronga bigote como su ídolo. A partir de ese momento, una madeja de pelambre hirsuta se agolpó bajo su nariz, mientras la barba desaparecía. La rivalidad entre la Barba y el Bigote comenzaba.
Macri usó la madeja de pelos, epítome de su masculinidad puesta en duda tras el secuestro, durante mucho tiempo. Ella le granjeó el respeto de la población porteña, por su conexión con aquellos bigotes famosos de la nación. Este bigote le daba la fuerza, la entereza necesaria para reprimir cuando había que reprimir, robar cuando había que robar, y no votar cuando no sabía dónde mierda estaba.
Macri utilizó su bigote poronga como propaganda política, accediendo incluso a la jefatura del gobierno porteño gracias a su feliz asociación con la dureza y la honestidad. Finalmente, en una conocida declaración de prensa, declaró que el bigote según Froid era una metáfora del pene, pero que como en el PRO no les gustaba andar dando vueltas con metáforas, a partir de ese momento andarían a pija limpia. El bigote poronga se quitó su camuflaje capilar y mostró su verdadera naturaleza, granjeándole más éxitos, como el apoyo de la comunidad homosexual.
Sin embargo, la barba echada al inodoro pensaba y maquinaba volver a la compañía de Mauricio. Por esta razón, esta comunista extensión de pelo tramó un gran plan.(tenia un buen y peludo celebro)
La barba, que se fraguó una imagen montonera y peronista viajando en el tiempo a los años '70 en Argentina, donde conocería a Cristina Fernández y Néstor Kichinet, se volvió el asesor de imagen de Mauricio en el 2005. Desde allí, trazaría su lento plan de conquista facial. Durante años intentaría convencer al Jefe de Gobierno de que se afeitara, sin conseguirlo. Sin embargo, invocó la cláusula nº 108b Infine del Contrato de Amistad y Silencio Político con los gobernantes del país, amenazándolos con contar en público que de montoneros ellos no tenían nada, y planificó una serie de incidentes públicos.
La presidencia mandó comandos psicobolches de la SIDE a infiltrarse en los colegios, y a muchachones boqueteros de la Cámpora a derrumbar edificios públicos (bares, gimnasios y colegios). Los boqueteros cumplieron su función a la perfección, y tocó el turno a los psicobolches, quienes organizaron tomas masivas de colegios públicos por supuestos recortes presupuestarios a la educación. Macri estuvo en su peor momento. Tras los incidentes pautados con la presidencia, el ahora Durán Barba aconsejó al dirigente afeitarse su bigote poronga, para mejorar su imagen pública. Vencidos los argumentos, el Mesías se quitó su marca de identidad. Serían épocas oscuras para el bigote poronga.
El bigote poronga ha hecho intentos para seguir adelante. Sin embargo, tras probar con varios candidatos posibles, se dio cuenta de que Macri es el Elegido. El Único. Es el Neo del Bigote Poronga. Ya veremos cómo sigue la historia
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